Una importante inyección de recursos invertirá el Minvu, a través de su programa Quiero mi Barrio (PQMB), para fortalecer y mejorar los espacios públicos de Reñaca Alto Norte, en Viña del Mar.

Son los vecinos los invitados a participar en la ejecución de este programa que tiene por finalidad contribuir a mejorar la calidad de vida de los habitantes del sector.

“Estoy muy contenta. Esperamos que siga adelante el avance que ha hecho el Programa Quiero mi Barrio. La primera obra que se va ejecutar es la instalación de luminarias, la que necesitamos sobremanera, sobre todo los adultos mayores. Muchos de nosotros nos movilizamos por la noche y no vemos nada, y con esto podremos estar más seguros”, manifestó Miriam Acevedo, vecina del barrio.

Será la propia comunidad la encargada de definir las obras que aquí se ejecutarán con un marco presupuestario que supera los 500 millones de pesos.

Al respecto el seremi Minvu Valparaíso, Rodrigo Uribe, comentó que se intervendrá el polígono de esta zona los próximos tres años “con una serie de obras urbanas y sociales que cambiará la calidad de vida de la comunidad. Estamos comenzando la intervención del Programa Quiero mi Barrio en Reñaca Alto con una primera obra que tiene que ver con un recambio de luminarias en el sector. De esta forma serán los propios vecinos quienes serán los encargados de definir qué es lo que quieren para su barrio.

La intervención en el sector favorecerá a más de dos mil personas con obras urbanas y sociales.

Obra de Confianza

La obra de confianza es la primera intervención urbana que efectúa el PQMB en el territorio, priorizada a su vez por los vecinos.

Para Reñaca Alto se contempla el proyecto de mejoramiento de iluminación pública vial de algunas calles del barrio, entre las avenidas Primera y Octava, y las calles Cuatro y Doce, en donde se realizará un recambio de al menos 70 luminarias existentes que cumplieron su vida útil.

La iniciativa tendrá una inversión superior a los 35 millones de pesos y apunta a generar condiciones de iluminación que posibiliten el empoderamiento por parte de los vecinos, y disminuyan la percepción de inseguridad de los peatones y residentes.